sábado, 27 de octubre de 2007

08/09/2007


Por fín llegó nuestro día. Eneko y yo estábamos pletóricos, super emocionados. Quién nos lo iba a decir, nos íbamos a casar. Íbamos a materializar nuestro amor a través del matrimonio. La Iglesia de San Mateo nos abría sus puertas para que diéramos el "Sí, quiero".

Todos estábamos muy ilusionados, la familia, los amigos, todos estaban guapísimos, haciéndonos compañía en el día más importante de nuestras vidas. El cura, todo hay que decirlo, más serio que una lechuga.

El día de la boda, yo personalmente estaba muy tranquila. Ya había pasado mis nervios semanas antes y creo que mi cuerpo por fín había comenzado a relajarse. Eneko estaba más nervioso, hasta se trabó en su lectura.

Otra anécdota que nos aconteció en la misa, fué que a mí se me olvidó leer en el traspaso de las alianzas. Pese a todo, la cosa estuvo muy bien.

Y la cena, espectacular. Cenamos en el Restaurante Andere, un sitio dedicado a este tipo de eventos, como bodas, comuniones, bautizos. Comimos, bebimos, bailamos,... hasta mis primas, Ana y Sonia, mi hermano Jorge y yo nos marcamos la canción de los primos, vamos de traca, matraca, una gozada.

La gente se lo pasó genial, terminamos todos agotados, pero que nos quiten los bailado. Eneko y yo ya éramos marido y mujer, haníamos cumplido el sueño de nuestras vidas y estábamos henchidos de felicidad.

3 comentarios:

Alfonso dijo...

Que seais muy felices durante toda
vuestra vida, es lo que os deseamos
todos nosotros.

Alfonso dijo...

Olárizu, ahora tienes que hacer
un post de vuestro viaje de novios
por Canarias.

Karmele García dijo...

Bueno, ya era hora de que continuarais con el blog, creía que lo teníais olvidado